MELENDI
Sexo: Macho
Raza: Galgo
Tamaño: Grande
Tamaño: Grande
Procedencia: Perrera de Huesca
Fecha de nacimiento (aprox): 20/05/2012
Fecha de entrada:5/02/2019
NO VALES PARA NADA, ME REPETÍAN
Hoy voy a contaros mi historia y espero que todos los humanos que nos leen a través de esta pantalla quieran ayudarme y pueda ser algún día feliz como jamás he sido.
Llegué al refugio hace varios meses procedente de una perrera donde me dejaron porque como repetía una y otra vez mi galguero, ya no valía para nada.
Allí hay pocas plazas para albergar a peludos a los que no nos quieren, algunos hemos sido objetos y herramientas, otros caprichos, otros se han criado cimarrones tras ser abandonados, allí hay de todas las clases, tamaños, edades y colores.
Lo peor de todo es que cuando está lleno empiezan a matarnos, porque a día de hoy la ley en la comunidad de Aragón lo permite, es decir, a la ley le importamos una M y parece ser que tampoco valen para nada nuestras vidas.
Yo soy un galgo español de 7 años de edad, fui usado durante varios años para la caza de la liebre, vivía en un zulo oscuro y solo salía para trabajar y obedecer a mi amo.
Un día me rompí, me hice daño pero igual corría, pasé a manos de otro amo, pero este también dijo que no valía, y así sucesivamente, hasta que terminé siendo viejo para cazar y cojo para correr en una perrera donde mi unico destino era la muerte, el sacrificio si lo queréis adornar.
¿Quién iba a quererme?
Sinceramente ya me había hecho a la idea de mi final, pero un día todo cambió.
Me subieron a una furgoneta y me trajeron aquí.
Cuando llegué vi muchos peludos y me asusté un poco, pero al poco tiempo me di cuenta en que no era para nada parecido al lugar como del que llega a, aquí me acariciaban, me decían cosas bonitas, me daban buena comida para recuperar mi peso, me cuidaban, también me pusieron un nuevo nombre, al cual ya empiezo a responder, me llamo Melendi.
Me costó un poco coger confianza porque tenía mucho miedo, pero a día de hoy ya les conozco y confío en mis cuidadores.
Me llevaron al vete para ver mi estado de salud y sobretodo valorar mi patita, la cual llevo soldada de haber estado tanto tiempo así.
No tengo ninguna enfermedad y ya he ganado mucho peso, ahora ha llegado la hora de pasar por quirófano, pero para ello mis cuidadores una vez más necesitan de vuestra ayuda para ayudarme, pero lo más importante de todo es que necesito una casita de acogida donde puedan atenderme después de ser operado, sin una casa de acogida no será posible que puedan operarme.
Puedo contaros de mi que no me llevo muy bien con otros machos, con hembras no tengo problema, que me encanta jugar a la pelota y sobretodo que soy muy feliz cuando los hago con los niños, sí, con los humanos más peques, en ellos si confió plenamente.
Ahora que habéis leído mi historia, una más en este mundo cruel en el que nos toca vivir, espero que me ayudéis a poder encontrar una casa de acogida para que puedan operarme y puedas correr como hacía antes de herirme, hace ya tanto tiempo que ni lo recuerdo.
¿Vais a ayudarme a conocer la verdadera felicidad y el bienestar animal?
No me dejéis solo, os necesito.
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